Filosofía

Al igual que nosotros, las plantas son lo que comen. Si aplicas una nutrición deficiente a una planta, producirá productos de escaso valor nutricional. Y, evidentemente, cuanto mejor sea la nutrición que le ofrezcamos a la planta, más saludables y nutritivos serán los productos (las frutas y verduras) para nosotros.

A día de hoy, nuestras tierras de cultivo están tan sobreexplotados con fertilizantes sintéticos y pesticidas que nuestro suelo ha quedado privado de la mayoría de su microflora y oligoelementos. Sin estos oligoelementos y microbios, nuestros campos producen cosechas de escaso o nulo valor nutricional.

Tenemos que dar marcha atrás y volver a consumir alimentos orgánicos saludables con el fin de luchar contra las enfermedades y los problemas de salud y desarrollar nuestro sistema inmunitario. Lo mismo puede decirse de nuestras plantas: una nutrición adecuada promueve un sistema inmunitario sano y activo, capaz de defender a las plantas frente a todas las amenazas naturales. ¡Tal como había previsto la Madre Naturaleza!